Distancia: Desde Iruya 8 km
Dificultad: MEDIA
Duración:  caminando 3/4 hs. de ida

CONSEJOS / TIPS

• Si no conoces el camino o no sos de andar por la montaña podes contratar guía local.

• Esta la posibilidad de ir en Tour.

• Si es época de lluvias tener en cuenta que el rio puede crecer y puede llegar a ser peligroso el caudal.

• Por mas que intentes no mojarte es mejor asumir que lo vas a hacer y mojarte, asi no perdés tiempo.

• llévate un calzado para mojarte, y otro para tener seco.

• No dejes basura en ninguna parte, tráetela en alguna bolsa.

LINK MAPA GOOGLEMAPS: https://goo.gl/maps/4KjKon3XgVo7MgA79

Se recorren unos  8 km en 3/4 horas y se atraviesan unos 15 cruces de río (a pie) antes de llegar a San Isidro. si día estaba nublado o es épocas de lluvias corres riesgo a no poder volver de la misma manera, ya que podría crecer el caudal del río si la lluvia empezaba a caer. 

Desde Iruya ofrecen hacer la excursión en camioneta o a caballo, pero lo mas lindo es  hacerlo caminando ya que vale aún más la experiencia del trayecto.

Al partir se baja al pueblo al lecho del río Iruya y desde allí hay dos opciones. Una sería seguir el camino al costado del río y la otra subir a la montaña para seguir un sendero. Para ambas opciones se recomienda llevar una mochila con abundante agua, alimento y protección solar. En el caso de elegir la opción del río, una muda de ropa y calzado también, porque durante este trayecto es imposible no mojarse.

Todo el camino es en forma de zigzag, ir saltando entre piedras y cruzar el río unas cuantas veces es una parte fundamental de la travesía. La mejor manera de orientarse es seguir los postes del tendido eléctrico que a su vez siguen el mismo camino del río hasta la entrada al pueblo.

La llegada al pueblo te recibe con unos hermosos y largos escalones que obviamente hay que subir, como todo por aquí!

San Isidro al igual que Iruya, parecen estar suspendidos en la montaña. Es un lugar detenido en el tiempo, sin señal ni conexión a internet, plenamente para conectar con la naturaleza y, por supuesto, con uno mismo.

Estando ya en San Isidro, podés hacer un recorrido por el pueblo, visitar el cementerio en las alturas y subir al mirador, se puede almorzar en alguno de los comedores y degustar comida típica de la zona. El guiso de quínoa, las empanadas salteñas, los tamales y el locro son de las mejores opciones.
Es posible hacer noche teniendo en cuenta lo mas precario del lugar, muchos lugareños alquilan habitaciones para turistas. Si pasas la noche preparate para contemplar una de las noches más estrelladas que vas a ver en tu vida.